Se puede emplear en sentido literal (el tiempo atmosférico) y metafórico. Referido al físico humano, aconseja no hacer notar los gestos que pueden reflejar nuestra decepción ante cualquier suceso. Referido al comportamiento, recomienda mantener el temple y no desanimarse cuando se presentan contrariedades y momentos difíciles, pues, pese a no poder cambiar la situación, se puede cambiar la actitud.
Al mal tiempo, buena cara
Otros Proverbios
Agua de febrero, llena el granero
A la tercera va la vencida
Gallina vieja hace buen caldo
Haciendo y deshaciendo se va aprendiendo