El popular portal web Sitios de España, a través de los votos del público ha dado como ganadora a Granada en el que se buscaba la ciudad más bonita de España. En la votación final se midió con Córdoba a la que superó por casi el doble de los votos. A estas alturas, con permiso del maestro Agustín Lara, ya podemos decir: Granada, tierra soñada por todos.
La Torre de la Vela es la Torre de Babel
El número de visitantes de nuestra ciudad crece año tras año. No estamos hablando de una de las muchas ciudades de costa con las que cuenta España y triplican su población en el verano. Hablamos de Granada, una ciudad deseada por moros y cristianos y donde han convivido también judíos y gitanos. Hoy en día es una ciudad dedicada a las nuevas generaciones, a la enseñanza y con ventanas a otros tiempos, otras culturas, otros mundos.
Granada se encuentra en una situación actualmente ligada a muchas culturas antiguas y a todas las modernas que vienen a disfrutar de ellas, le hace ser una torre de Babel del siglo XXI.
Dos moriscas en la final
No es de extrañar que las dos ciudades que se midieran en la final sean dos ciudades muy marcadas por la cultura musulmana. Córdoba, capital del Califato y Granada capital del Reino Nazarí y último bastión de la España musulmana que con tanto cariño recordamos. Casi el doble de votos las separaron en última instancia. La respuesta la sabe, sin desmerecer a la Mezquita, todo el que ha llegado ha Granada encerrándose entre la sierra de la Alfaguara, la dehesa del Generalife, el cerro de San Miguel y con la vega como único horizonte mira hacia las montañas de Sierra Nevada, sabiendo que más allá, pocos kilómetros separan por el mar que da nombre a este Instituto Mediterránero Sol del más viejo continente, madre África.
El futuro
No hay acto más sabio que hacer de Granada una ciudad de aprendizaje. Su gente sabe que lo que tienen no es el pasado. Granada es un tesoro que encuentra su pureza en su riqueza cultural. Es una ciudad de todos y todas a la que a través de la educación se sigue compartiendo con nuevas culturas haciendo que el encanto de Granada continúe por muchos años siendo algo de todos y de nadie, como la misma naturaleza, pura.
